Protocolo para el trabajo en épocas de altas temperaturas
Debido a las altas temperaturas registradas en los últimos veranos, surge una duda frecuente: ¿cuándo está prohibido trabajar al aire libre durante una ola de calor?
Ante esta cuestión, ¡hay novedades! Ya se ha presentado el Plan Estival 2025 que señala la prohibición de realizar trabajos al aire libre durante situaciones de olas de calor extremas.
Este plan se activa entre el 16 de mayo y el 30 de septiembre de 2025.
Pero, ¿afecta esta medida a todos los trabajos? ¿Cuándo se considera que hay una ola de calor?
¿Cuándo están prohibidos los trabajos?
Según recoge el Plan Estival 2025 los meses de julio y agosto presentan un mayor riesgo de estrés térmico para las personas trabajadoras.
Por ello, es importante intensificar la vigilancia en sectores especialmente expuestos, como el sector agrícola, la hostelería o el comercio, prestando especial atención al cumplimiento de las obligaciones de alta, encuadramiento y cotización a la Seguridad Social, así como al empleo de personas extranjeras.
El objetivo es supervisar aquellas actividades desarrolladas al aire libre, como la jardinería, la recogida de residuos o la restauración y ocio en exteriores.
Además, se incluyen trabajos en espacios cerrados con altas temperaturas, como invernaderos o lavanderías industriales.
En este sentido hay que recordar que en mayo de 2023, el Consejo de Ministros aprobó el Real Decreto-Ley 4/2023, que introdujo importantes cambios en la normativa sobre las condiciones mínimas de seguridad y salud en el trabajo.
Esta reforma, impulsada por los efectos de episodios extremos de calor, reforzó el marco jurídico de la prevención de riesgos laborales.
Entre las principales modificaciones destaca la actualización del Real Decreto 486/1997, incorporando la obligación de adoptar medidas específicas frente a riesgos derivados de fenómenos meteorológicos adversos, como las olas de calor.
A continuación, detallamos cuándo se consideran prohibidos los trabajos al aire libre en situaciones de ola de calor y las medidas a adoptar para garantizar la seguridad y salud de las plantillas:
• Cuando se produzcan fenómenos meteorológicos adversos que afecten al correcto desarrollo de la actividad laboral durante las horas del día en las que estos concurran.
En estos casos, es necesario adaptar las condiciones de trabajo.
• Cuando la Agencia Estatal de Meteorología, o en su caso, el órgano autónomo correspondiente que cuente con ese servicio, emita un aviso de fenómenos de nivel naranja o rojo.
De ser así, se tendrán que reducir o modificar las horas de desarrollo de la jornada laboral prevista.
En el caso de que haya alerta por altas temperaturas las empresas estarán obligadas a:
• Interrumpir los trabajos que se realicen al aire libre.
• Reducir la jornada laboral de la plantilla.
• Fomentar la flexibilidad horaria.
• Redistribuir la jornada para evitar realizar tareas en las horas de mayor riesgo.
Estas medidas se implementan para evitar que algunas tareas se desarrollen a ciertas horas del día en las que existan riesgos que puedan afectar a la salud de las personas trabajadoras.
Previamente, algunos sectores como el de la construcción ya aplicaban medidas similares.
De hecho, en el convenio de la construcción se establece la jornada intensiva desde el 11 de junio hasta septiembre, con las horas no trabajadas recuperables en invierno.
¿Están obligadas las empresas a incluir en sus planes de riesgos laborales medidas específicas para las olas de altas temperaturas?
Sí, las empresas tienen que incluir en sus planes de riesgos laborales medidas específicas que indiquen cómo actuar en caso de olas de calor.
Cada empresa debe evaluar y determinar qué actividades laborales deben suspenderse o adaptarse durante episodios de calor extremo.
Además, es crucial considerar las características de cada persona trabajadora asignada a una actividad laboral.
Por ejemplo, no es lo mismo una persona de 22 años en buen estado físico que una persona con 55 años con problemas cardiovasculares.
Es fundamental analizar tanto la naturaleza de la tarea como las condiciones físicas de quien la desempeña.
Teniendo esto en cuenta los niveles de riesgo del Plan Nacional pueden interpretarse de la siguiente manera:
• Nivel de riesgo amarillo: se considerará que existe riesgo leve para personas mayores de 65 años con otros factores de riesgo.
• Nivel de riesgo naranja: el riesgo será moderado para personas mayores de 65 años o menores de 65 años con múltiples factores de riesgo; y será riesgo elevado para mayores de 65 años con otros factores de riesgo adicionales.
• Nivel de riesgo rojo: se considerará riesgo extremo para mayores de 65 años con otros factores de riesgo adicionales.
La AEMET es la entidad responsable de emitir alertas por riesgo de olas de calor.
¿Qué pasa si no se puede prescindir de una determinada actividad durante una ola de calor?
Cuando se desarrollen trabajos al aire libre y en los lugares de trabajo que, por la actividad desarrollada, no puedan mantenerse cerrados es imprescindible tomar medidas adecuadas para proteger a las personas trabajadoras de cualquier riesgo relacionado con fenómenos meteorológicos adversos, entre ellos, las temperaturas extremas.
Es fundamental evaluar los riesgos laborales teniendo en cuenta tanto las características de la tarea a realizar como las condiciones físicas de quienes la llevan a cabo.
En estos casos, se deberán adoptar las siguientes medidas:
• Permitir descansos más frecuentes y pausas regulares en áreas sombreadas.
• Instalar toldos o sombrillas para reducir la exposición directa al sol.
• Suministrar agua fresca para que las personas trabajadoras puedan mantenerse hidratadas durante toda la jornada laboral.
¿Qué sectores y actividades se ven afectadas por la prohibición de no trabajar al aire libre ante una ola de calor?
La prohibición de realizar actividades al aire libre durante periodos de calor extremo afecta a todos los sectores, aunque algunos se ven especialmente impactados.
Entre los más afectados se encuentran:
• Agricultura.
• Construcción.
• Pesca en buques.
• Industrias extractivas.
• Sector de limpieza.
• Hostelería.
Es decir, la prohibición de trabajar al aire libre durante una ola de calor afecta a todo tipo de personas trabajadoras, entre las que se incluyen:
• Personal de terrazas de restaurantes y bares.
• Jornaleros.
• Personal de limpieza.
• Jardineros y personas dedicadas al mantenimiento de parques.
Sin embargo, hay puestos de trabajo esenciales que no pueden suspenderse, como los de bomberos, sanitarios, policías o agentes forestales.
En estos casos, es fundamental adoptar medidas adicionales, como el uso de prendas transpirables que faciliten el desarrollo seguro de las actividades laborales.
Por lo tanto, aunque algunas tareas deberán interrumpirse completamente durante una ola de calor, otras podrán continuar con ajustes en los horarios o condiciones de trabajo.
¿A qué sanciones se enfrentan las empresas que no cumplan con sus obligaciones ante una ola de calor?
Las sanciones, según la Ley sobre Infracciones y Sanciones en el Orden Social, podrían ser de más de 900.000 euros.